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LaPalabra de Fe

Aumentando Tu Fe Cada Dia

La Fe Real

Por el Pastor Ricardo Botto

Dos Clases de Conocimiento

Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie.

- 1 Corintios 2:14-15

En este pasaje nos encontramos con dos hombres; el hombre natural y el hombre espiritual; cada uno de ellos tiene un estilo de vida diferente y camina con conocimiento distinto. El primero con un conocimiento basado en los sentidos y el segundo en un conocimiento por revelación.

El conocimiento por los sentidos es aquel que se basa en lo que dicen nuestros cinco sentidos físicos: el tacto, la vista, el oído, el gusto y el olfato. Es la verdad que se basa en nuestra propia experiencia. Es lo que muchos llaman “la voz de la experiencia”.

Cuando recibí a Jesús yo estaba en fuego por el Señor; predicaba por todos lados y siempre hablaba del Señor; cuando los hermanos con mas tiempo vieron mi entusiasmo me dijeron: “Estás en el primer amor, el próximo año, cuando se te pase, serás como nosotros.” Menos mal que no les hice caso, y más de veinte años después sigo en fuego por el Señor.

Estos hermanos mayores basaban su vida espiritual en la experiencia, y no les hizo ningún bien pues se convirtieron en “témpanos de hielo espirituales.”

1 Corintios 3:1-3

1 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.

2 Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,

3 porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?

El creyente que camina en esta clase de conocimiento es llamado carnal. Un creyente carnal es aquel que su vida está gobernada o regida por los sentidos físicos.

El creyente que camina en este tipo de conocimiento trata de hacer las cosas a su manera y no a la manera de Dios.

Josué 1:8

8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Romanos 10:17

17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.

El conocimiento por revelación es la verdad que viene a nuestros corazones por el oír y el meditar la Palabra de Dios.

Es lo que le pasó a Pedro cuando Jesús le preguntó a sus discípulos quien era él.

Mateo 16:13-17

13 Viniendo Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?

14 Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas.

15 El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?

16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.

17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.

Pedro recibió el conocimiento por revelación, debido al tiempo que pasó con Jesús, se dio cuenta que era el Mesías prometido, que era el Hijo de Dios.

El mayor cambio que hubo en mi vida fue cuando pase dos años de mi vida estudiando la Palabra en el centro de Entrenamiento Bíblico “La Palabra de Fe”; fue tan intensivo el estudio que literalmente fui “mudado en otro hombre”.

Hebreos 5:14

14 pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.

El creyente maduro es aquel que basa su vida en el conocimiento por revelación. Es el creyente que camina en la verdad de la Palabra de Dios

Diferencias entre el Conocimiento por Revelación

Y el Conocimiento por los Sentidos

El conocimiento por los sentidos es carnal mientras que el conocimiento por revelación es espiritual.

El conocimiento por los sentidos se basa en las sensaciones físicas, mientras que el conocimiento por revelación se basa en la Palabra de Dios.

El conocimiento por los sentidos produce incredulidad, mientras que el conocimiento por revelación produce fe.

2 Corintios 4:13

13 Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos.

El conocimiento por los sentidos habla lo que ve o siente, mientras que el conocimiento por revelación habla lo que cree.

2 Corintios 5:7

7 (porque por fe andamos, no por vista).

El conocimiento por los sentidos camina por vista, el conocimiento por revelación camina por fe.

¿Cómo Caminar en el Conocimiento por Revelación?

1 Pedro 2:2

2 desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación.

Josué 1:8

8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Santiago 1:21

21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.

Solo hay una manera de caminar en el conocimiento por revelación, depositando la Palabra de Dios en nuestros corazones.

Dos Tipos de Fe

La Fe Natural o Fe de Tomás

Juan 20:24-29

24 Pero Tomás, uno de los doce, llamado Dídimo, no estaba con ellos cuando Jesús vino.

25 Le dijeron, pues, los otros discípulos: Al Señor hemos visto. El les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré.

26 Ocho días después, estaban otra vez sus discípulos dentro, y con ellos Tomás. Llegó Jesús, estando las puertas cerradas, y se puso en medio y les dijo: Paz a vosotros.

27 Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.

28 Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!

29 Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.

Tomás solo creía lo que podía ver; su lema era “ver para creer”. Tenía un tipo de fe que solo se basaba en la evidencia de sus sentidos.

Hoy día mucha gente piensa de esta manera; dicen: “Si no lo veo no lo creo”. Pero esto no tiene sentido. Nosotros creemos que tenemos antepasados aunque nunca los hayamos visto; creemos que tenemos cerebro aunque no lo veamos; creemos en los átomos aunque no los veamos.

La fe de Tomás solo puede creer en las cosas que ve, siente o toca.

Las personas con esta fe dicen cuando oran: “Siento que Dios me escuchó”; pero la verdad es que Dios nos escucha cuando oramos de acuerdo a su voluntad aunque no sintamos nada. Estas personas creen en lo que siente su cuerpo antes de creer en la Palabra de Dios.

El sentir algo no significa que Dios nos haya escuchado; pues Marcos 11:24 dice que primero debemos creer y luego recibir.

La Espiritual o Fe de Abraham

Romanos 4:17-22

17 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen.

18 El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia.

19 Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara.

20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios,

21 plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido;

22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia.

Abraham tenía esta clase de fe espiritual que cree en la Palabra de Dios antes de creer en lo que dicen sus sentidos físicos.

Romanos 10:17

17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.

La fe espiritual se basa en la Palabra de Dios; porque la fe viene por oír la Palabra.

Abraham hizo cuatro cosas que lo llevaron a tener esta fe espiritual.

1. Oyó la promesa de Dios acerca de su necesidad

2. Creyó la promesa

3. No consideró las circunstancias, ni lo que decían sus sentidos físicos

4. Alabó a Dios por la respuesta.

Si seguimos esos pasos tendremos la misma fe que tuvo Abraham para recibir la promesa de Dios.

Dos Tipos de Incredulidad

Incredulidad Por Falta de Conocimiento de la Palabra de Dios

En Romanos 10:17 dice: “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios”; es decir, la fe llega a nosotros cuando adquirimos conocimiento de la Palabra de Dios; luego, la falta de conocimiento de la Palabra de Dios producirá el efecto contrario, la incredulidad.

Oseas 4:6

6 Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.

La falta de conocimiento de la Palabra de Dios trae como resultado que no tengamos fe para recibir lo que necesitamos de Dios.

Mucha gente no puede recibir lo que Dios ha provisto para ellos.

El Pastor Fred Price dijo: “Si hubiera sabido lo que se ahora mi hija nunca hubiera fallecido a los cinco años.”

Es triste, pero hay muchas cosas que nos han pasado porque no sabíamos entonces lo que conocemos ahora; por eso debemos pasar mas y mas tiempo en la Palabra de Dios.

¿Cuál es la cura para la incredulidad por ignorancia?

Josué 1:8

8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Salmo 1:1-3

1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.

3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.

Proverbios 4:20-22

20 Hijo mío, está atento a mis palabras; Inclina tu oído a mis razones.

21 No se aparten de tus ojos; Guárdalas en medio de tu corazón;

22 Porque son vida a los que las hallan, Y medicina a todo su cuerpo.

Romanos 10:17

17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.

La cura para la incredulidad por ignorancia es adquirir conocimiento de la Palabra de Dios.

Incredulidad Por Desobediencia

Hebreos 3:7-4:6

7 Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: Si oyereis hoy su voz,

8 No endurezcáis vuestros corazones, Como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto,

9 Donde me tentaron vuestros padres; me probaron, Y vieron mis obras cuarenta años.

10 A causa de lo cual me disgusté contra esa generación, Y dije: Siempre andan vagando en su corazón, Y no han conocido mis caminos.

11 Por tanto, juré en mi ira: No entrarán en mi reposo.

12 Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo;

13 antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.

14 Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio, 15 entre tanto que se dice: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.

16 ¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés?

17 ¿Y con quiénes estuvo él disgustado cuarenta años? ¿No fue con los que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto?

18 ¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que desobedecieron? 19 Y vemos que no pudieron entrar a causa de incredulidad.

1 Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.

2 Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron.

3 Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo: Por tanto, juré en mi ira, No entrarán en mi reposo; aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo.

4 Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día.

5 Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo.

6 Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia.

Hebreos 4:6 en la Nueva Biblia de los Hispanos dice así: “Por tanto, puesto que todavía falta que algunos entren en él, y aquéllos a quienes antes se les anunció las buenas nuevas no entraron por causa de su desobediencia (incredulidad)”.

En este pasaje podemos ver claramente este tipo de incredulidad es por desobediencia.

La desobediencia es no dejarse convencer de que la Palabra de Dios es cierta y por eso tomar la decisión de no hacerla.

Estos versos nos citan lo que pasó en los capítulos 13 y 14 de Números, cuando el pueblo de Israel se negó a obedecer a Dios y entrar en la tierra prometida.

El pueblo de Israel había visto el poder de Dios para sacarlos de Egipto; pasó en seco por el medio del Mar Rojo, bebió agua de la peña y comió el maná, el pan del cielo; de día los protegía la nube y de noche la columna de fuego, no hubo enfermo entre ellos y su ropa no se desgastó. Pero a pesar de eso dijeron: “¿Para que nos trajo Dios aquí? ¿Para que nos maten los habitantes de la tierra prometida? Ojala muriésemos en el desierto; hagámonos capitanes y volvamos a Egipto. Se rehusaron a creer a Dios y murieron en el desierto.

Israel conocía cual era la voluntad de Dios; pero no se dejó persuadir para actuar en ella; prefirieron creer en sus temores que hacer lo que Dios les dijo; y finalmente recibieron lo que temían, murieron en el desierto.

Muchos creyentes son así, conocen la Palabra de Dios pero prefieren creer en sus temores y nunca entran en su “tierra prometida”. Rehúsan hacer lo que la palabra de Dios dice.

Creer es un acto de tu voluntad, tu decides si crees o no la palabra de Dios. La desobediencia también es un acto de tu voluntad, tu decides el rehusarte persuadir. La pelota está en tu cancha.

¿Cuál es la cura para la incredulidad por desobediencia?

1 Samuel 15:22

22 Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros.

Isaías 1:19

19 Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra.

La cura para la incredulidad por desobediencia es obedecer.

El Asentimiento Mental

John Wesley, fundador de la Iglesia Metodista, dijo que el diablo le ha dado a la iglesia un sustituto para la fe, que se parece y suena como ella, tanto que la gente no puede ver la diferencia. El lo llamaba “asentimiento mental”

Mucha gente lee la Biblia, y está de acuerdo que es verdad, pero solo con su mente; y eso no produce resultados porque la fe viene del corazón.

Marcos 11:23-24

23 Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.

24 Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.

El asentimiento mental es similar a la incredulidad. La persona que asiente mentalmente solo cree lo que ve o siente. Es la persona que dice que la Palabra de Dios es verdadera pero se rehúsa hacerla.

Santiago 2:14

14 Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?

La fe siempre actúa en lo que cree; la fe que no tiene acciones correspondientes nunca recibirá nada de Dios.

Eso es lo que hace el que asiente mentalmente; dice: “Yo se que la Palabra de Dios es verdad, pero...”; y no se da cuenta que al decir esto se excluye de las promesas de Dios.

2 Corintios 5:7

7 (porque por fe andamos, no por vista).

Nosotros andamos por la fe y no por vista; no importa que circunstancias existan a nuestro alrededor; como no asentimos mentalmente sino mas bien creemos la Palabra de Dios, alcanzaremos la victoria en todo momento de nuestras vidas.